En definitiva, se trata de publicitar una acción con un propósito.
Sin valorar el riesgo que entraña para la salud (esto se lo dejamos al GREP, que ya está en ello, pero es SS así que tampoco les vamos a meter prisa), ni entrar en cuestiones deontológicas, podemos alegar que la luz en una película es muchísimo más determinante para producir un efecto físico que casi matar de hambre a una mujer. De cualquier forma, como el GREP emitirá un informe, y como seguro que este tipo de temas son recurrentes de aquí al verano, os ofreceremos su 'fallo'.
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