Cuando finalicé mis
estudios de Diplomado en Nutrición Humana y Dietética me di cuenta que junto al
título de diplomado venía incluido el "complejo de ser dietista",
nunca me habían hablado sobre él, pero nada más recoger mi título y salir a la
calle se dio cita en mi vida. En aquello años (1996-1997), ser dietista en
España era algo totalmente desconocido no sólo por los profesionales de la
salud, sino también por la sociedad en general.
Recuerdo la sensación de
frustración que compartíamos todos los diplomados y que de algún modo todavía
persiste en nuestro interior. Aquel sentimiento de rechazo por la clase médica,
enfermería, farmacia y hasta por las administraciones públicas nos mantenía a
todos firmemente unidos.
El "complejo de ser
dietista" es algo que sólo conocemos las primeras generaciones de
dietistas-nutricionistas y que poco a poco ha ido desapareciendo. Recuerdo
aquellos momentos en los que se decían cosas tan absurdas como que los
dietistas sólo podíamos hacer dietas a personas sanas y no a enfermas, o que no
podíamos montar nuestra propia consulta sin estar bajo la tutela de un médico,
hecho que por desgracia llegó a ser realidad durante los primeros años de vida
de nuestra titulación.
El primer gran paso que
dimos algunos profesionales fue ponernos un nombre consensuado. Por aquel
entonces, algunos se hacían llamar dietistas, otros "nutricionistas"
(que era algo más cool) y
algunos ni siquiera sabían exactamente lo que eran y se hacían llamar
“diplomados en dietética”.
Y el universo conspiró a
nuestro favor…
Así, un grupo de
dietistas-nutricionistas de Pamplona y que habían fundado la Asociación de
Dietistas Diplomados de Navarra se dieron cuenta que un titulado sin un nombre
profesional bien definido no tenía futuro.
Lo primero que hicimos
fue ponernos en contacto con la Asociación Española de Dietistas-Nutricionistas
(AEDN), la única asociación que por aquel entonces nos defendía y luchaba por
la profesión, porque deseo recordar que en la mayor parte de las sociedades
científicas que hoy conoces no aceptaban a los diplomados en dietética. Muchos
de los que lean estas líneas habrán vivido la decepción de tratar de
inscribirse en alguna sociedad de nutrición y negarle el derecho a ser socio.
Hoy, estas sociedades multidisciplinares se desviven por tener
dietistas-nutricionistas pagando sus cuotas de asociados y organizan congresos,
eventos, cursos y seminarios dirigidos a dietistas-nutricionistas recién titulados,
aprovechando que éstos desconocen la historia de nuestra profesión, así como el
daño que han infligido gratuitamente a muchos dietistas-nutricionistas que
trataron de hacerse un hueco en hospitales públicos y privados.
La AEDN nos recibió con
los brazos abiertos y empezamos un trabajo conjuntamente para definir la
denominación profesional de los diplomados. Después de meses de trabajo
concluimos que lo mejor para todos era hacernos llamar
“dietistas-nutricionistas”.
Hoy, todos reconocen
fácilmente nuestra profesión, de hecho hasta nuestros mayores enemigos nos
llaman “los dietistas-nutricionistas”, aunque muchas veces lo hagan con
desprecio. Hasta incluso hemos conseguido que la propia Ley de Ordenación de
las Profesiones Sanitarias o la Orden CIN que regula el Grado en Nutrición
Humana y Dietética incluya la denominación profesional de
“dietista-nutricionista”.
Todavía recuerdo las
caras de mis compañeros discutiendo cómo debíamos llamarnos, qué acaloradas
eran siempre las conversaciones y a la vez que unidos nos sentíamos todos.
Hoy, la situación es
realmente diferente. La mayor parte del colectivo no conoce los duros momentos
que vivió la profesión y claro, ahora lo que para algunos todavía está por
mejorar, para muchos ha mejorado bastante. Es curioso, pero es nuestra
realidad.
Hoy, ese espíritu de
cohesión firme “parece” que
se ha ido. Y digo textualmente “parece” porque bajo mi punto de vista los
dirigentes de las Asociaciones y Colegios Profesionales jamás habían estado tan
unidos e ilusionados en la mesa diálogo que todos llamamos AEDN. Unidos e
ilusionados pese a que algunos hayan abandonado la AEDN de forma voluntaria,
algo esperado desde hace unos años por muchos de nosotros. Siempre tendrán la
puerta abierta de AEDN y serán bien recibidos.
Todo este largo camino lo
hemos recorrido juntos, dirigentes históricos en AEDN como Pilar Cervera,
Yolanda Sala, Nahyr Shinca ó Susan Jhonston han sabido acoger a las nuevas
generaciones de dietistas-nutricionistas con los brazos abiertos y sin poner
condiciones. A ellas mi especial reconocimiento y agradecimiento.
El buen momento que
actualmente vive la profesión, lleno de éxitos y avances muy importantes para
todos nosotros, no está exento también de fracasos. Así, la madurez plena de
una profesión asume los éxitos y los fracasos como algo bueno y necesario para
crecer.
La evolución y desarrollo
de una profesión es como cuando de una piedra queremos sacar una efigie, a
golpe de cincel, cada uno de esos golpes, por dolorosos que sean, configuran la
historia y el desarrollo de nuestra profesión.
Bajo mi punto de vista,
el dietista-nutricionista se ha consolidado en nuestro país. Hay más de 17
universidades que imparten un título de oficial de Grado, algo impensable para
los primeros diplomados. Los dietistas-nutricionistas ejercen su profesión con
libertad y empiezan a darse los primeros pasos para la incorporación definitiva
en el Sistema Sanitario Público, existiendo plazas públicas en algunas
Comunidades Autónomas.
Sin embargo, todavía nos
queda mucho por hacer.
Este año 2010 lo hemos
terminado con grandes noticias. Entre ellas, merece la pena resaltar la
ponencia que defendimos ante el Senado y por la que se ha aceptado que cuando
se incorporen los dietistas-nutricionistas en el ámbito sanitario público lo hagan
a razón de un dietista-nutricionista cada 50.000 tarjetas sanitarias en Atención
Primaria, 1 dietista-nutricionista cada 500.000 habitantes en Salud Pública y un dietista-nutricionista cada 100 camas en Atención Especializada. También, hemos
recibido con alegría la doble victoria que AEDN ha tenido en la demanda que
Naturhouse interpuso contra AEDN y por la que nos reclamaban 300.00 euros.
Ganamos a Naturhouse en primera y segunda instancia. También, en este 2010
hemos visto como los jueces han aceptado a trámite los recursos presentados
ante el Tribunal Supremo por las competencias en nutrición y dietética
asignadas en los grados de Farmacia y Enfermería.
Para este 2011 la Junta
de Gobierno ha trabajo duro para que podáis disfrutar del I Encuentro Anual de
Dietistas-Nutricionistas y el II Foro de la AEDN previsto celebrarse en Toledo
los días 25 y 26 de Marzo de 2011. También, llega nuestro deseado congreso, que
cada vez acoge a más dietistas-nutricionistas y que se celebrará los días 6, 7
y 8 de octubre de 2011 en Valladolid. Aprovecho la ocasión para agradecer al
Colegio Oficial de Dietistas-Nutricionistas de Castilla la Mancha y a la
Asociación de Dietistas-Nutricionistas de Castilla y León la gran labor que han
desempeñado y su constante apoyo a la AEDN.
Además, en este 2011
estrenamos el reciente Gabinete de Comunicación de AEDN, dirigido por Amaya
Uriz y que cada viernes nos hace llegar lo más top de lo que sucede en AEDN y en las
Asociaciones y Colegios Profesionales. Así, en el 2011 muchos de los actos van
a llevar una información simultánea a través de redes sociales como facebook o twiter o tendrán su propio blog para que todo el
mundo pueda acceder de la manera más inmediata a la información y
documentación.
El 2011 viene cargado de
buenas cosas para el colectivo de dietistas-nutricionistas. Sin duda, puedo
augurar que será un año de noticias y grandes éxitos en la lucha por la
profesión y la defensa de los intereses de la ciudadanía.
En nombre de la Junta de
Gobierno de AEDN y en el mío propio deseo trasmitiros la ilusión con la que
seguimos trabajando en este 2011, así como haceros saber nuestro compromiso con
todos vosotros, con la profesión y con la sociedad en general.
Te deseo un año lleno
de alegrías y éxitos en lo personal y profesional.
Espero verte en
Toledo, donde además de trabajar, lo pasaremos genial.
Giuseppe Russolillo
Presidente Asociación Española de Dietistas-Nutricionistas
Director´s Board International Conference of Dietetic Associations
Nota Final:
Permitidme, con el respeto a todas aquellas personas que habéis luchado por la profesión, agradecer a ese grupo de personas que trabajamos la denominación porfesional con una breve mención: Leire Remiro, Xabier Echavarren, Gema Yoldi, Helena Vicente, Arantza Ruiz de las Heras, Esther Garde, Cristina Fernández, Ana Sánchez, Imelda Elizari, Pilar Cervera, Yolanda Sala y todos los miembros de la Junta Directiva de AEDN en los años 1997 y 1998.
1 comentario:
Soy Dietista-Nuticionista socia de AEDN CV0141 MUCHAS GRACIAS A TODOS Y A TODAS POR EL GRAN ESFUERZO REALIZADO Y POR EL QUE NOS QUEDA POR REALIZAR. ANIMO Y P'ALANTE....
Publicar un comentario